Por: Alejandra Cueva Flores
Resumen
Este ensayo aborda la importancia de la retroalimentación en la educación universitaria, destacando su papel en el desarrollo académico. Se analiza cómo la retroalimentación efectiva, proporcionada tanto por docentes como por estudiantes, contribuye al crecimiento y mejora continua. Se enfatiza la bidireccionalidad del proceso, donde docentes y estudiantes desempeñan roles activos. Además, se menciona el desafío de la retroalimentación entre pares y sus beneficios para el aprendizaje. En conclusión, se destaca que la retroalimentación, combinada con evaluación formativa, tiene el potencial de transformar la educación universitaria.
Palabras clave: educación universitaria; mejora continua; retroalimentación
Abstract
This essay addresses the importance of feedback in university education, highlighting its role in academic development. It discusses how effective feedback, provided by both teachers and students, contributes to growth and continuous improvement. The bidirectionality of the process, where teachers and students play active roles, is emphasized. Additionally, it mentions the challenge of peer feedback and its benefits for learning. In conclusion, it emphasizes that feedback, combined with formative assessment, has the potential to transform university education.
Key words: continuous improvement; feedback; university education
La retroalimentación del aprendizaje es un componente clave en nuestra educación universitaria, que tiene como objetivo proporcionar información y guiarnos para mejorar nuestro proceso de aprendizaje. A través de la retroalimentación, los docentes nos brindan información valiosa sobre nuestro desempeño, lo que les permite fortalecer nuestras habilidades y conocimientos. En este ensayo, se analizará la importancia de la retroalimentación en la educación superior, su impacto en el rendimiento académico y el papel que desempeña tanto el docente como el estudiante en este proceso.
En la enseñanza universitaria, los estudiantes enfrentamos una amplia variedad de evaluaciones, desde exámenes hasta trabajos escritos y proyectos. Sin embargo, la forma en que se evalúa a los estudiantes puede influir directamente en el enfoque y dedicación al estudio. Si la evaluación se centra únicamente en medir la memoria de hechos o conceptos, es probable que los estudiantes adopten una estrategia de estudio enfocada en memorizar la información para pasar el examen sin profundizar en el entendimiento real de los temas.
La retroalimentación es esencial para el desarrollo académico de los estudiantes en la educación universitaria. Proporciona información sobre el progreso y las áreas de mejora, lo que permite a los estudiantes ajustar su estrategia de estudio, ya no solo enfocada en la memorización sino en la comprensión y profundización del tema, y abordar sus debilidades. La retroalimentación adecuada también fomenta la motivación y el compromiso con el aprendizaje, ya que los estudiantes pueden ver su crecimiento y logros a lo largo del tiempo (1). Es por estas razones que la evaluación en la enseñanza universitaria debe estar acompañada por la retroalimentación del docente. Además, la retroalimentación ayuda a los estudiantes a comprender las expectativas del docente y los criterios de evaluación. Esto crea una mayor claridad en las tareas y actividades académicas, lo que les permite centrarse en los aspectos clave y demostrar un desempeño más sólido.
Esta retroalimentación tiene que ser efectiva dado que es esencial para que los estudiantes comprendan sus fortalezas y áreas de mejora. Si se brinda un reconocimiento adecuado a un desempeño positivo, los estudiantes se sentirán motivados y reforzarán sus habilidades y conocimientos. Por otro lado, cuando se identifican aspectos por mejorar, es importante que la retroalimentación no se limite a señalar los errores, sino que también se proporcionen sugerencias, preguntas y orientación para que los estudiantes descubran y aborden sus deficiencias por sí mismos. Esto empodera a los estudiantes y los impulsa a tomar un rol activo en su proceso de aprendizaje.
El proceso de retroalimentación no debe ser unidireccional ya que limita el alcance del mismo para comunicar un aprendizaje significativo, en el estudiante como receptor interpreta el mensaje; la comprensión de este mensaje condiciona su apropiación y actuación posterior, y sin la posibilidad de participación, el estudiante puede verse limitado en el uso de la retroalimentación (2). Por consiguiente, la retroalimentación debe ser entendida como un proceso bidireccional, en donde el docente como el estudiante juegan un papel importante en el proceso. El docente debe proporcionar retroalimentación oportuna y constructiva, que esté acorde con los objetivos de aprendizaje. Además, el docente debe alentar activamente a los estudiantes a buscar y valorar la retroalimentación, asegurando así que se involucren en su propio proceso de mejora continua.
Por otro lado, el estudiante también debe estar dispuesto a recibir y utilizar la retroalimentación para su beneficio. Esto implica ser proactivo en la búsqueda de comentarios, identificar metas de aprendizaje claras y entregar sus trabajos oportunamente. El estudiante debe ver la retroalimentación como una oportunidad para crecer y transformarse en un aprendiz más competente.
En nuestras clases hemos visto que uno de los retos es dar la retroalimentación entre pares, la cual debe ser una retroalimentación constructiva y útil. Sin embargo, este proceso también tiene beneficios considerables, ya que nos permite aprender de las fortalezas y debilidades de nuestros compañeros. Al revisar y valorar el trabajo de otros, también podemos reflexionar sobre nuestras propias habilidades y áreas de mejora; lo cual facilita la autoevaluación, observando las area en las que necesitamos mejorar, plantearnos nuevas estrategias para lograr los objetivos de aprendizaje del curso (3).
En conclusión, la retroalimentación del aprendizaje en la educación universitaria es crucial para mejorar el proceso de formación de los estudiantes. Cuando la retroalimentación se brinda de manera efectiva y constructiva, los estudiantes pueden fortalecer sus habilidades y conocimientos, así como superar sus áreas de mejora. Los docentes desempeñan un papel fundamental al proporcionar una retroalimentación significativa y oportuna que contribuya al desarrollo académico y profesional de los estudiantes. La retroalimentación, combinada con una evaluación formativa, tiene el potencial de transformar la educación universitaria y formar profesionales competentes y capaces. La retroalimentación del aprendizaje en la educación universitaria es un elemento fundamental para nuestro crecimiento académico. Tanto el docente como el estudiante deben estar comprometidos con este proceso, buscando de manera activa y receptiva la retroalimentación. La retroalimentación entre pares también juega un papel importante en este proceso, permitiéndonos aprender de nuestros compañeros y mejorar nuestro propio desempeño.
REFERENCIAS
Vera Cubas MD. Retroalimentación como herramienta efectiva para el aprendizaje. TZHOECOEN [Internet]. 2022;14(2):21–33. Disponible en: http://dx.doi.org/10.26495/tzh.v14i2.2281
Quezada Cáceres S, Salinas Tapia C. Modelo de retroalimentación para el aprendizaje: Una propuesta basada en la revisión de literatura. Rev Mex Investig Educ [Internet]. 2021 [citado el 2 de diciembre de 2023];26(88):225–51. Disponible en: https://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1405-66662021000100225&lng=es&tlng=es
Valdivia S. Retroalimentación Efectiva en la Enseñanza Universitaria. En Blanco y Negro [Internet]. 2014 [citado el 2 de diciembre de 2023];5(2). Disponible en: https://revistas.pucp.edu.pe/index.php/enblancoynegro/article/view/11388